El hechizo del cine llega a los espectaculares paisajes de Durango con ‘The Dead Don’t Hurt’. En esta película, estrellas de renombre como Viggo Mortensen y Vicky Krieps se unen para desafiar las convenciones del género western al darle un papel principal a las mujeres y empoderarlas en un entorno del Salvaje Oeste.
‘The Dead Don’t Hurt’ está respaldada por Talipot Studio y transporta a los espectadores a la década de 1860, en pleno auge del Salvaje Oeste en San Francisco, California.
Sin embargo, el corazón de esta película late en Durango, donde se filmaron el 90 % de sus escenas, reviviendo el estado como un destacado destino cinematográfico.
The Dead Don’t Hurt, una trama de amor, perdón y venganza
La productora Regina Solorzano resalta que la película explora temas de amor, perdón y venganza. La elección de Durango como escenario se basa en un profundo amor por la industria cinematográfica y en el potencial visual de la región.
Además, se enfatiza el valor del cine como una poderosa herramienta para mejorar la imagen de México a nivel mundial, cambiando la narrativa de América Latina.
La producción de ‘The Dead Don’t Hurt’ inyectó 6 millones de dólares en la economía local, beneficiando a diversos sectores, desde la hotelería y los restaurantes hasta el transporte y los servicios de locación.
Este impacto económico demuestra el potencial de Durango como un destino cinematográfico de gran relevancia.
Belleza Arquitectónica de Durango
La película aprovecha la rica belleza arquitectónica de Durango, destacando lugares emblemáticos como Nombre de Dios, Pueblo Nuevo y la capital, Durango.
Nombre de Dios, con su encanto colonial y sus adoquinadas calles, se convierte en un escenario evocador.
Pueblo Nuevo, ubicado en las faldas de la majestuosa Sierra Madre Occidental, ofrece una perspectiva única al combinar la belleza natural de sus paisajes montañosos con la autenticidad de sus tradiciones culturales.
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La capital de Durango, con su arquitectura histórica, plazas y edificios coloniales, brinda un entorno auténtico y visualmente impresionante para las escenas cruciales de la película.
‘The Dead Don’t Hurt’ no solo es una obra cinematográfica, sino también un tributo a Durango y su sorprendente diversidad visual y cultural, que cautivará tanto a audiencias locales como globales.
